Ayer no pude escribir nada, estaba muy cansada y me dormí rápido, ¡lo cual fue genial! , los blogs anteriores al igual que este los he escrito en la madrugada, pues me cuesta mucho conciliar el sueño.
En el blog anterior contaba que intentaría arreglar y recoger mi cuarto, y lo logré; bueno, más o menos, separé la ropa sucia por colores, pero aún sigue en el suelo, ordené mi tocador pero aún hay vasos y cosas que no corresponden a ese lugar.
Celebró mucho haber acomodado esas cosas, ¿se ordenaron mis pensamientos? No, pero al menos ya no me hablan en voz alta y permanecen como susurros.
Hoy fue mi segundo día de hacer ejercicio, encontré hace tiempo una página de internet que te ofrece planes de ejercicio gratis y los encuentro bastante buenos y aptos para mi. Si tomamos en cuenta que tengo casi 7 años sin practicar ningún tipo de ejercicio, que mis rodillas truenan cuál matraca y el hecho de que en estos dos días he comenzado a fumar de nuevo, siento que me fue bastante bien, pues pude completar las rutinas sin desmayarme (yeiiiii). El compartir este tipo de cosas que requieren constancia en un blog me ayuda a motivarme, a pesar de que probablemente sea yo la única que leerá esto, quizá es por eso que los youtubers aman hacer cualquier tipo de challenge.
Mi cuerpo ha sido mi mayor inseguridad desde que tengo uso de razón, no me gusta nada, quizá las únicas dos partes de mi cuerpo que me gustan son mis ojos y el cabello, y siento que comprometerme a terminar un programa de ejercicio me ayudará a estar más en contacto con mi cuerpo y comenzar a quererlo, aunque no logre nunca tener el súper abdomen definido como el de Barbara Regil (que por cierto no me parece nada atractivo pero bueno, el mío tampoco).
En otras cosas, también he continuado estudiando el contrabajo, me he prometido paciencia, pues regularmente si algo no me sale bien lo común es que asiente el instrumento y no lo vuelva a tocar si no hasta el día siguiente de lo contrario me invaden unas ganas tremendas de gritar y azotar mi instrumento en el suelo para romperlo cual guitarrista de rock al final de un concierto. Hoy en especial me alegró mucho la capacidad que tuve de afrontar los momentos en que no me salía algún pasaje, y me felicitó por eso. Se que mañana puede no ser así, pero entonces tendré este blog para recordarme que vale la pena seguir intentándolo.
En el jardín las cosas van bien, tengo una pequeña invasión de hormigas y me estoy debatiendo si mantenerme por la horticultura orgánica o dejar que algún pesticida me ayude, porque por un lado esa tierra es la casa de las hormigas y por otro seguramente si las corro de acá ellas podrán encontrar cualquier otro lugar.
Hace casi un mes platicaba con un amigo acerca de la tierra, muchas veces escucho a la gente decir pero ¿por qué le inviertes tiempo y esfuerzo si al final esa ni es tu casa y ese no es tu patio?. Creo más bien que nosotros debemos prestarle nuestro amor y servicio al pedacito de tierra donde te toca estar, sin importar si es tuyo o no, como diría la frase “Haz el bien sin mirar a quien”, algo así.
Cuando llegué a esta casa el patio era casi pura tierra, y hoy se pinta de color verde, y comparado con la sensación de ver un lugar bonito y con vida, puedo decir que no me ha costado trabajo.
Definitivamente en mi plan de vida está con letras grandotas Voy a vivir en una casa chiquita en medio de un terreno grandote, espero que mi esfuerzo algún día de los frutos suficientes para lograr eso.
Esa foto que comparto es de hoy, y de mi gato llamado Kronos.
En el blog anterior contaba que intentaría arreglar y recoger mi cuarto, y lo logré; bueno, más o menos, separé la ropa sucia por colores, pero aún sigue en el suelo, ordené mi tocador pero aún hay vasos y cosas que no corresponden a ese lugar.
Celebró mucho haber acomodado esas cosas, ¿se ordenaron mis pensamientos? No, pero al menos ya no me hablan en voz alta y permanecen como susurros.
Hoy fue mi segundo día de hacer ejercicio, encontré hace tiempo una página de internet que te ofrece planes de ejercicio gratis y los encuentro bastante buenos y aptos para mi. Si tomamos en cuenta que tengo casi 7 años sin practicar ningún tipo de ejercicio, que mis rodillas truenan cuál matraca y el hecho de que en estos dos días he comenzado a fumar de nuevo, siento que me fue bastante bien, pues pude completar las rutinas sin desmayarme (yeiiiii). El compartir este tipo de cosas que requieren constancia en un blog me ayuda a motivarme, a pesar de que probablemente sea yo la única que leerá esto, quizá es por eso que los youtubers aman hacer cualquier tipo de challenge.
Mi cuerpo ha sido mi mayor inseguridad desde que tengo uso de razón, no me gusta nada, quizá las únicas dos partes de mi cuerpo que me gustan son mis ojos y el cabello, y siento que comprometerme a terminar un programa de ejercicio me ayudará a estar más en contacto con mi cuerpo y comenzar a quererlo, aunque no logre nunca tener el súper abdomen definido como el de Barbara Regil (que por cierto no me parece nada atractivo pero bueno, el mío tampoco).
En otras cosas, también he continuado estudiando el contrabajo, me he prometido paciencia, pues regularmente si algo no me sale bien lo común es que asiente el instrumento y no lo vuelva a tocar si no hasta el día siguiente de lo contrario me invaden unas ganas tremendas de gritar y azotar mi instrumento en el suelo para romperlo cual guitarrista de rock al final de un concierto. Hoy en especial me alegró mucho la capacidad que tuve de afrontar los momentos en que no me salía algún pasaje, y me felicitó por eso. Se que mañana puede no ser así, pero entonces tendré este blog para recordarme que vale la pena seguir intentándolo.
En el jardín las cosas van bien, tengo una pequeña invasión de hormigas y me estoy debatiendo si mantenerme por la horticultura orgánica o dejar que algún pesticida me ayude, porque por un lado esa tierra es la casa de las hormigas y por otro seguramente si las corro de acá ellas podrán encontrar cualquier otro lugar.
Hace casi un mes platicaba con un amigo acerca de la tierra, muchas veces escucho a la gente decir pero ¿por qué le inviertes tiempo y esfuerzo si al final esa ni es tu casa y ese no es tu patio?. Creo más bien que nosotros debemos prestarle nuestro amor y servicio al pedacito de tierra donde te toca estar, sin importar si es tuyo o no, como diría la frase “Haz el bien sin mirar a quien”, algo así.
Cuando llegué a esta casa el patio era casi pura tierra, y hoy se pinta de color verde, y comparado con la sensación de ver un lugar bonito y con vida, puedo decir que no me ha costado trabajo.
Definitivamente en mi plan de vida está con letras grandotas Voy a vivir en una casa chiquita en medio de un terreno grandote, espero que mi esfuerzo algún día de los frutos suficientes para lograr eso.
Esa foto que comparto es de hoy, y de mi gato llamado Kronos.

Comentarios
Publicar un comentario