Ir al contenido principal

Ruégame

Quédate en mi vida, que ya es más tuya que mia, dime qué me amas y que podemos resolver esto juntos. 
Que no estás dispuesto a qué todas nuestras noches y días juntos se pierdan en el olvido, que soy el amor de tu vida como tú eres de la mía. 
Ruégame que yo también voy a rogarte que no me dejes perderme en el abismo.
Estás cosas que nos separan parecen tontas al compararlas con los problemas de la actualidad, está separación es estúpida también. 
Yo prometo y tú prometes.
Una vida llena de risas y yo una vida llena de amor.
En qué cabeza cabe que todo esto es el final, si aún huelo tu perfume en mi cama, entre sábanas que no me atrevo a cambiar. Y tú risa es la imagen permanente de mis ojos cerrados y tú abrazo es la única forma en que encuentro consuelo para dormir. 
Ye la paso en la ventana por si es que decides venir a arreglar las cosas, porque yo estoy dispuesta a darlo todo por ti. 
Y no es falta de autoestima ni falta de amor propio, es que no puedo renunciar así nada más a la vida que imaginé contigo.
Imaginación. Es lo que me vuelve loca.
Te imagino a ti, amando a alguien más, y simplemente dejo de existir y me convierto en carcaza de lo que algún día fui. 
Y pienso, pienso y pienso. 
¿Qué hice mal? ¿Será así siempre?
Yo corriendo detrás de un amor que no me ama. O ¿qué no me ama lo suficiente para venir por mi?
Y pensé que ibas a ser tú.
Pensé que caminaría mis juntos frente a un altar simbólico, que uniera nuestras vidas, que ya estaban juntas, para la eternidad. 
Cada hora que pasa me convenzo de que ya no será.
Ya no será, verte envejecer.
Ya no será tampoco criar hijos ni tener un hogar.
Porque quien quiere hace.
Quién ama vuelve.
Y yo nunca me fuí.
Aquí sigo.
Aquí seguiré. 
Tonta, tonta tonta...
Tonta y enamorada. 
Yo nunca me voy...

Comentarios

Entradas más populares de este blog

el último día

¿Qué harían ustedes si supieran que este es su último día? Yo no sé que hacer, solo se que esté es mi último día...  Ya no puedo más con esta mente No puedo más con saber que no tengo amor. Que siempre dije a gritos ahogados que se estaba acando este juego para mí. Ya no tengo nada a qué aferrarme Ni siquiera a mis gatas. Esta noche será mí última, y la verdad está idea solo me da paz.  Lo intenté de verdad Todo lo que hice, lo hice intentando encontrar algo a lo que aferrarme. Creo que no tengo ningún adiós pendiente.  Creo que todo está listo para partir, porque a dónde voy no necesito nada. Para los seres que dejare aquí atrás les dejo comida y agua como para tres días.  Hoy dormiré, y encontraré la paz que no pude encontrar en este plano. Solo necesitaba decirle a alguien.  Espero que alguien encuentre esto a tiempo para que mis bebés no sufran mucho.  Adiós.

el amor Real

Que difícil hablar de amor.  Amor es un concepto original para cada quien.  Amor romántico, amor de amigos, amor de hermanos, amor de padres.  Hay muchos tipos de amor.  Pienso que cada tipo de amor es real a su manera, por ejemplo lo que tuvimos tu y yo fue real, aunque no volvieras por mi, cuando estuvimos juntos, todos esos momentos fueron reales.  También esta el amor que se queda, es el amor que tengo ahora por ti.  El que sabes que no volverá, por más que llore, o ruegue, quien quiere estar, está. Tal vez a ti te de alivio en pensar en un futuro, y piensas que el amor espera para volver, pero para mí no es así, el amor espera, pero no de esperar, sino de desear, y yo deseo que estés bien, que puedas perdonar y seguir adelante. Y espero también que no esperes que te espere como tú quieres, porque eso es una mentira bien dicha, tu ya no volverás a mi, y mi corazón hoy lo acepta.  De mientras toca trabajar en mi, en mis proyectos y en mis ambiciones...

Ser humano

Estoy aquí, en esta tierra. Dios y la vida me han puesto este par de ojos que ven de manera peculiar todo lo que pasa al rededor. Un ser humano, eso soy, pero al parecer eso significa algo muy especial para mí, pues al parecer soy incapaz de ver todo lo que me rodea con la misma mirada que mis pares. Cada día que pasa mis razones para seguir en este plano se van desvaneciendo y solo van quedando pequeños trazos de lo que llamamos vida. Cada día, está existencia se va haciendo más y más pesada, al punto de que ya no hay espacio en mi pecho para respirar y aunque sigo notando la belleza que hay en este planeta y en el universo por alguna razón esas cosas no conforman ninguna razón para seguir aquí.  Soy yo mi propia enemiga, y lo he sido desde que tengo memoria.  Siempre fue difícil para mis padres quererme tal y como era, siempre necesitaron una hija más aplicada, más obediente, menos contestona, menos enojona. Y así crecí aprendiendo que quien soy nunca será suficiente. Rápida...