Estar bien

Estar bien no es un estado, es un proceso. 

Estar bien significa hacer las cosas que te generan felicidad y placer real y eso es algo muy individual, por eso es que estar bien significa mu has cosas diferentes. 

Por eso estar bien no es un estado si no un proceso, porque significa hacer, crear, estar en movimiento. Es una energía, no es algo estático.  

Son los pequeños o grandes momentos que nos regalamos nosotros mismos, por eso es que no depende de nadie más que nosotros.

Yo encuentro el estar bien en muchas cosas, desde el obligarme a salir de la cama hasta crear algo nuevo. 

Crear, creo yo, es el estado más bonito del ser humano, crear algo con el pensamiento y hacerlo físico con las manos es una de las sensaciones más bonitas que experimento. Es un proceso que puede empezar en el momento menos esperado. Una noche de insomnio puede dar luz a una creación digna de compartir. 

Para mí, estar aburrida es uno de los momentos más importantes porque de ahí nacen mil ideas de muchos tamaños que me dan la energía necesaria para imaginar y crear. Y aunque parezca difícil de creer, no es facils estar aburrido. En la actualidad hemos reemplazado el aburrimiento con la distracción, y eso es una trampa que nos ponemos a nosotros mismos para no pensar.

En lo personal me encanta hacer cosas con mis propias manos, desde cocinar algo sencillo hasta crear un mueble, desde escribir un pensamiento hasta crear una historia o una canción. El chiste es mantenerse en movimiento y usarlo de inercia para seguir adelante. 

Cuando tengo el espacio me encanta sembrar y llenarme las manos de tierra. Benditas las manos sucias porque significa que he hecho algo. 

Este fin de semana tuve la fortuna de crear algo chiquito pero bonito con una persona especial. Espero que con el paso del tiempo esta pequeña creación signifique que con cariño e imaginación se crean espacios y momentos lindos. 

Así que tal vez es momento para ti de materializar alguno de esos pensamientos que tienes mientras vas camino al trabajo o antes de dormir, dejar en esta vida un pequeño testimonio de que estuviste bien en un momento y poco a poco llenar la vida de esos vestigios.